Ahora que ya entendemos la factura eléctrica pasemos al gas! El consumo de gas constituye una parte importante del consumo energético en los hogares. El uso del gas se reparte básicamente entre la calefacción, la cocina y el agua caliente, y se puede suministrar a través de botellas (Gas Butano o Propano) o a través de una red canalizada (Gas Natural).
Si se realiza el suministro de gas en recipientes envasados (la típica bombona), se paga por un contenido determinado de gas (12,5 kg para butano y 11 kg para propano) a un precio establecido por tarifa. El precio del envase ha subido un 35% desde finales del año 2009, y continua su tendencia alcista.
Si el suministro es a través de una red canalizada de gas, se formaliza un contrato con la empresa suminstradora y se factura cada dos meses.
De esta manera se factura además del consumo una serie de conceptos adicionales que serán explicados a continuación. De igual forma, la subida del precio del gas para uso doméstico se ha incrementado en un 20% en el último año (mediados 2010 a mediados 2011), con perspectivas de futuras subidas.
Por lo tanto, cada vez más, pequeños ahorros en la factura suponen mayores cantidades en la economía familiar, siendo fundamental no solamente un consumo eficiente del gas sino también una elección adecuada de las condiciones de suministro contratadas, para lo cual es necesario entender los distintos términos que componen la factura.
Se muestra a continuación una factura tipo de gas y se explica el significado de los distintos apartados y condiciones de suministro.
Es el consumo de gas realizado durante el periodo de facturación, medido en kWh (kilovatios hora). El consumo real se ha medido por parte de la compañía suministradora en m3 (metros cúbicos) de gas, obteniendo la conversión entre metros cúbicos y kWh según el factor indicado en la propia factura. Este factor representa la energía real que proporciona un m3 de gas, en función de la calidad media del gas suministrado. Por lo tanto, lo que se está facturando realmente es la energía calorífica del gas y no el caudal consumido.
2) Término fijo
Este término fijo representa el coste por el derecho del usuario a la disponibilidad de una cantidad determinada de gas, que va en función de la tarifa contratada.
Este término es constante y no depende del consumo de gas realizado, por lo que constituye el coste mínimo de la instalación cuando no hay consumo (exceptuando alquileres o impuestos). Cuando existe consumo de gas, se añade a este término fijo un coste variable en función del consumo.
3) Alquiler del contador
El contador de gas puede ser propiedad del usuario o de la compañía suministradora. En este último caso, se repercute un coste de alquiler al usuario a través de la factura.
4) Canon IRC
Si el suministro de gas se realiza a un edificio de viviendas, y las instalaciones comunes del edificio son propiedad de la compañía distribuidora, se repercute a cada usuario una cuota por uso y mantenimiento de las mismas.
5) Derechos de alta y acometida
Al contratar un nuevo suministro, la compañía distribuidora repercute el coste de la nueva instalación o ampliación de la existente a través de unos derechos de alta y acometida, que se reflejan generalmente en la primera factura. Las compañías suelen lanzar promociones de alta gratis para nuevos clientes en aquellas comunidades que tienen la instalación hecha, INFÓRMATE Y APROVÉCHALAS!.
6) IVA aplicado
A la suma del término fijo por disponibilidad y término variable por consumo de gas, y cualquier otro concepto de los anteriores si procede, se le aplica el impuesto al valor añadido (IVA) que actualmente es del 18%.
7) Periodo de facturación
Es el periodo durante el cual se ha facturado el consumo de gas, que generalmente es de dos meses. En ocasiones, por ejemplo cuando hay cambio de tarifa o de precios, se suele dividir el periodo de facturación considerando por separado las antiguas y las nuevas condiciones.
8) Tarifa de acceso
La tarifa contratada va en función del consumo de gas esperado. Para uso doméstico las tarifas más habituales son TUR1 para consumo inferior a 5000 kwh/año (cocina y agua caliente) y TUR2 para consumos superiores (habitual en viviendas con caldera de gas para calefacción).
9) Coste de peaje
El coste de peaje es un término que representa la cuota que paga la comercializadora a la empresa distribuidora por usar sus redes. Este precio ya está incluido en el coste fijo y variable, por lo que figura sólo a modo informativo.
10) Diferencia con respecto a tarifa de último recurso.
A modo información en la factura figura una cifra que muestra la diferencia del coste para un suministro en mercado libre y en último recurso.
11) Gráfico de consumo.
Muestra de forma gráfica el consumo mensual del último año, con el fin de conocer el perfil de consumo de gas a lo largo del año y detectar posibles desviaciones.
En ocasiones la factura emitida incluye los consumos de electricidad y de gas, si se ha contratado ambos servicios con la misma compañía suministradora.
Ahora ya sabemos un poco más de nuestra factura del gas, si tienes dudas o quieres compartir algo con nuestra comunidad estás invitado! Nuestro próximo artículo será sobre la discriminación horaria en el suministro eléctrico.