Por primera vez en cuatro años la luz ha bajado un 6,7% en abril. Solo hay una razón: en el primer trimestre, la mayor pluviometría, sol y viento a coste cero han elevado la generación renovable hasta casi el 50%. Está demostrado que con más renovables baja el precio de la luz y con mayor generación convencional sube. Cuando se dice que el mercado fuerza la bajada de la luz no es exacto, la realidad es que son las renovables las que reducen el precio del pool.
Las renovables abaratan la luz. Según el estudio de APPA sobre el impacto macroeconómico de las renovables, en el periodo 2005-2011 el coste de las primas renovables fue de 20.875 M€ y el ahorro por la disminución del coste de la energía por las energías renovables en el mercado diario de OMEL fue de 28.482 M€. Si añadimos el coste de las emisiones de CO2 evitadas de 2.825 M€ y las importaciones energéticas evitadas de 12.938 M€ en ese mismo periodo, se concluye que el ahorro total de las renovables a la economía nacional ha sido de 44.245 M€, más del doble que el coste de las primas.
Está demostrado que con más renovables baja el precio de la luz y con mayor generación convencional sube
El mayor consumo de renovables produce un ahorro en el precio de la energía que añadido a los costes evitados de emisiones y dependencia son superiores al coste de las primas que perciben. Las renovables suponen un ahorro para el consumidor, pero la bajada del precio de la luz hace crecer los costes regulados y entre ellos el coste de las primas.
¿Por qué el consumidor no se beneficia del ahorro que representan las renovables? Primero, porque la regulación le impide el acceso directo a las renovables cuando el consumidor puede generar su energía eléctrica de forma más barata con renovables que comprándola de la red.
Segundo, porque la bajada de la demanda eléctrica, el 20% desde 2008, hace que el regulador incremente los pagos por capacidad, restricciones técnicas y demás costes regulados para garantizar al sistema los ingresos que pierde por el menor consumo de electricidad que a su vez incrementa el déficit de la tarifa; por eso los beneficios de eléctricas y petroleras no han bajado pese al descenso de la demanda.
Tercero, el método de conformación del precio de la electricidad se referencia sobre el de la fuente más cara que es el gas y el carbón y determina el coste de las primas impidiendo que cada fuente tenga su precio.
Las restricciones técnicas y demás costes regulados garantizan al sistema los ingresos que pierde por el menor consumo de electricidad, y a su vez incrementa el déficit de la tarifa
Cuarto, la no internalización por cada fuente energética de todos sus costes hace que el sistema sea injusto y nada transparente sobre los costes reales de cada tecnología y que los beneficios de las renovables por importaciones y emisiones evitadas y mitigación del cambio climático no se tengan en cuenta.
Quinto, la falta de competencia deja al consumidor y al propio Estado cautivo de las empresas energéticas, sin soberanía alguna y perdiendo derechos.
Sexto, el ahorro de energía se elimina porque con la demanda a la baja incrementa el déficit de tarifa.
Las conclusiones son claras, es una excelente noticia que las renovables bajen el precio de la luz y que en España lo estén haciendo desde 2005 y la regulación eléctrica actual no sirve para el desarrollo de las energías renovables y de la eficiencia energética porque está anclada todavía en el sostenimiento de la economía de los combustibles fósiles que es la más cara para el consumidor.
Fuente: http://www.tendenciasenenergia.es