Los grandes accidentes nucleares, mas probables de lo que se creía

Se vuelven a conocer resultados de nuevos estudios que muestran el enorme peligro de la energía nuclear. Parece que poco a poco la humanidad va siendo más consciente de que puede que no valga la pena explotar esta compleja energía, sobre todo cuando cada vez es más evidente que las energías renovables, como la energía solar o la energía eólica, pueden llegar a representar la solución al problema energético antes de lo esperado.

Según un estudio dirigido por Jos Lelieveld, director del Instituto Max Planck de Química (Alemania), un accidente nuclear catastrófico como los de Fukushima o Chernóbil puede producirse en algún lugar del mundo una vez cada 10 o 20 años, lo que significa una probabilidad 200 veces superior a las estimaciones realizadas en Estados Unidos en 1990. Estos nuevos cálculos están hechos partiendo del número de reactores nucleares para usos civiles en operación, unos 440, pero los científicos advierten que otros 60 están en construcción.

Estos investigadores, a la vista de los resultados que han obtenido, piden que se realicen análisis y evaluaciones con profundidad de los riesgos asociados a las plantas nucleares, según informa el Max Planck. En Europa Occidental, por ejemplo, donde la densidad de reactores es alta, puede sufrir cada 50 años un episodio de contaminación grave por cesio-137.

Los cálculos para determinar la probabilidad de fusión del núcleo de un reactor con emisión al exterior en el mundo (hasta ahora cuatro: uno en Chernóbil y tres en Fukushima) se basan en el número total de horas de operación de los reactores nucleares existentes desde su puesta en funcionamiento. El informe no ha tenido en cuenta la fusión del núcleo de Three Mile Island, en 1979 en EE UU, porque fue una fusión parcial del núcleo. Los investigadores no distinguen entre tipo de planta o antigüedad, ni tienen en cuenta si están ubicadas en zonas de riesgo, por ejemplo sísmico.

En Europa una fusión de núcleo afectaría a 28 millones de personas

En el trabajo publicado recientemente en Atmospheric Chemistry and Physics, Lelieveld y sus colegas han utilizado modelos de ordenador, que simulan las condiciones meteorológicas, vientos y reacciones químicas en la atmósfera, para conocer los patrones de difusión de la contaminación radiactiva, centrándose en el cesio-137, un subproducto de la fusión del uranio.

Los resultados indican que, de media, el 50% supera un radio de 1.000 kilómetros y, aproximadamente, un 25% llegará más lejos de 2.000 kilómetros.  Solo el 8% de las partículas contaminadas se depositan en el suelo en un área de 50 kilómetros alrededor del accidente nuclear.

Al combinar estos datos con la distribución geográfica de los reactores en operación, los investigadores concluyen que si se produjese la fusión de un reactor nuclear en Europa Occidental resultarían afectados unos 28 millones de personas. En el sur de Asia, debido a la alta densidad de población, serían 34 millones, y en el este de Estados Unidos, entre 14 y 21 millones.

Vía El País

Un sol en la Tierra

Plasma ITERInteresantísimo artículo de Xavier Pujol publicado en MadrI+D que, en plena convulsión energética y tras el anuncio de próximas y nuevas subidas del precio de la electricidad, nos recuerda el proyecto ITER y la investigación mundial que se está realizando para conseguir un modelo comercial de reactor de fusión termonuclear, que desde que se empezó a pensar en ello ha esperanzado a la humanidad con la promesa de una energía más económica, limpia y casi infinita. Reproducimos íntegro a continuación:

Si alguna propuesta tecnológica puede revertir el actual modelo energético en el medio plazo, ese no es otro que el proyecto ITER. En plena fase de construcción, y con un presupuesto que podría alcanzar los 14.000 millones de euros, su objetivo es emular la energía de fusión del Sol. En 2020, a más tardar, debería empezar el gran experimento.

ITER (camino, en latín) es hoy por hoy un gran experimento. Existen bases más que fundadas, según su director general adjunto, Carlos Alejaldre, para que culmine con éxito. “En 2020 deberíamos probar que es posible alcanzar el factor 10”. En esencia, conseguir 500 megawatios de energía eléctrica con un gasto de tan solo 50 megawatios a partir de un único gramo de combustible.

El rendimiento, en opinión de los expertos, es más que razonable dado el tipo de combustible (deuterio y tritio) y la gestión posterior de residuos (material radiactivo de baja intensidad y duración, además de helio). También lo es en relación con el ratio de energía consumida y energía obtenida. No lo es tanto, a fecha de hoy, si se considera el enorme esfuerzo tecnológico y económico empleado para la puesta en marcha de la primera central de fusión, aunque se considera que ese aspecto va quedar rápidamente soslayado si se logra alcanzar el objetivo y se pasa a la explotación comercial de esta compleja fuente de energía.

El experimento

El éxito de ITER puede cambiar el futuro modelo energético. El experimento que debe desarrollarse en ITER es conceptualmente simple pero extremamente complejo desde el punto de vista tecnológico. Se trata, en esencia, de inducir la fusión de dos átomos (proceso contrario al de la actual energía de fisión), lo cual libera una enorme cantidad de energía. El problema es que hay que hacerlo a una enorme temperatura y en un reactor especialmente aislado.

En el conjunto de reactores Tokamak de ITER, formados por un millón de componentes con un peso total de unas 23.000 toneladas (el equivalente a 3 torres Eiffel), se espera alcanzar una temperatura de 150 a 200 millones de grados centígrados, aproximadamente 10 veces la temperatura existente en el núcleo del Sol.

En el núcleo solar, la energía se obtiene tras la fusión de átomos de hidrógeno. En condiciones terrestres, sin embargo, se ha observado un mayor rendimiento gracias a la fusión de deuterio y tritio, aunque se precisa una temperatura muy superior. A temperaturas tan extremas, los electrones se separan del núcleo y el gas se convierte en plasma, el medio idóneo para que se fundan los núcleos y se desprenda energía siguiendo la fórmula clásica descrita por Albert Einstein: E=mc2.

El reactor Tokamak es, en el fondo, como una enorme vasija soportada por campos magnéticos que contiene el plasma donde se produce la reacción de fusión nuclear. Por consiguiente, es el lugar donde se genera energía, además de helio y otros residuos de vida corta. La energía se empleará para generar vapor de agua y con éste mover las turbinas donde se producirá electricidad.

El cambio de modelo

Antes de llegar a este punto será necesario construir la enorme planta experimental de Cadarache, cerca de Marsella (Francia). Las previsiones apuntan a que el botón de encendido podrá apretarse en 2020 y que durante un periodo de un decenio, aproximadamente, se irán repitiendo con la finalidad de ganar eficiencia tanto en lo que se refiere a la producción de electricidad como en la mejora de los materiales y las condiciones de confinamiento.

De la importancia de este experimento y de las repercusiones que podría tener para el futuro, dan cuenta dos factores clave. De un lado, la participación multinacional, con la Unión Europea, Estados Unidos, Japón y China en cabeza. De facto, se trata de uno de los mayores consorcios internacionales formados con el objetivo de hacer posible una fuente de energía verdaderamente alternativa a las actuales.

Por otro lado, cabe destacar la puesta a punto casi simultánea del proyecto DEMO, que va a solaparse parcialmente en el tiempo. De él se esperan las primeras plantas piloto para la producción de energía a escala industrial. Si se cumplen los plazos, deberían estar listas para antes de 2040.

Sin embargo, hay indicios de que la fecha pudiera avanzarse sustancialmente. China e India, ambas en el consorcio ITER, parece que tienen en mente desarrollar de forma unilateral sus propias propuestas. Aunque poco ha trascendido al respecto, China parece ser la que tiene planes más concretos al respecto. No en vano, busca alternativas a una demanda energética creciente fruto del acelerado crecimiento interno de los últimos años.

Bien sea China o bien sea el consorcio público multinacional, el caso recuerda enormemente a la carrera por el Genoma Humano vivida en la década de los noventa protagonizada por un sector público que se vio impelido a actuar tras la irrupción de la empresa privada. Entonces, todo se aceleró. Es de esperar que ahora ocurra algo similar pero con una diferencia esencial: el borrador del genoma representaba la apertura de una enormidad de puertas para el desarrollo de la biomedicina y la biotecnología. La energía de fusión, en cambio, puede representar un cambio de modelo drástico de modelo y de dependencias económicas y políticas.

La cuestión de la seguridad

¿Es segura la energía de fusión? En opinión de los expertos que trabajan en el proyecto ITER, las condiciones de seguridad que se están implementando superan “de largo” cualquier variable, desde un atentado terrorista a una catástrofe natural como la ocurrida en Fukushima. Y aunque de algún modo se lograra afectar al reactor nuclear, las consecuencias nunca serían tan devastadoras como en una central de fisión. En primer lugar, por la naturaleza del combustible; y en segundo lugar, por las características de la reacción de fusión. “El mayor problema sería el derivado de las enormes temperaturas que se alcanzan en el reactor”, insiste Carlos Alejaldre, a la sazón responsable de seguridad de ITER. Bastaría, por tanto, con “dejar enfríar” el reactor, y tomar precauciones con eventuales emisiones cuya radiactividad se describe como de “baja intensidad”.

Fuente: MadrI+D

Reflexionando sobre energía nuclear

Portada de The EconomistHace unos días se conmemoraba el primer aniversario del desastre de Fukushima, y la prensa internacional analizaba desde todos los puntos de vista posibles el futuro de la energía nuclear. The Economist aporta un interesante análisis basado en el impacto económico.

En su análisis, The Economist recuerda cómo los accidentes de Three Mile Island, en Estados Unidos, el de Chernóbil, en Ucrania, sólo impactaron negativamente en la oponión pública. En ambos casos, la industria encontró rápidamente argumentos para desmantelar críticas tecnológicas fundamentadas. En el primer caso, recuerda el semanario, por la ausencia de muertes, lo cual venía a refrendar la supuesta seguridad de la central; en el segundo, la tecnología obsoleta y la falta de transparencia fueron justificaciones más que suficientes.

Fukushima, sin embargo, significa una cosa bien distinta. Cómo bien enfatiza el semanario norteamericano, el conjunto de centrales nucleares aportan apenas el 30% de la electricidad mundial y el crecimiento de la industria que representa se encuentra sometido a decisiones políticas. Y mantenerlo a toda costa sin la posibilidad de eliminar riesgos y sin mayores apoyos, obligará a repensar el modelo. En esencia, señala el articulista, por que se trata de una industria “demasiado cara” por el beneficio que aporta.

En Efimarket pensamos que una generación 100% renovable es posible, y animamos a nuestros lectores a participar en el cambio de modelo reduciendo nuestro consumo energético primero y generando nuestra propia energía después. Con Efimarket es posible no sólo pagar menos en tus facturas energéticas sino también convertirte en productor de energía limpia de forma fácil y rápida con nuestros kits solares de autoconsumo.

El ATC en Villar de Cañas seguirá adelante pese a las manifestaciones

ManifestaciónEl ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, asegura que, pese a las manifestaciones, la construcción del almacén temporal centralizado (ATC) para ubicar los residuos nucleares en Villar de Cañas (Cuenca) seguirá adelante.

Es bien sabido que todo lo relaccionado con la energía nuclear genera polémica. En Efimarket, te proponemos generar tu propia energía de manera más limpia, evitando así  la acumulación de peligrosos residuos nucleares. Hace poco hemos elaborado unos kits de autoconsumo más fáciles de instalar y de utilizar, para que la generación de energía limpia esté al alcance de todos. Descúbrelos aquí.

Soria señala que es necesario contruir el ATC, dado que España solo existe uno, en El Cabril (Córdoba), que tan solo almacena residuos de baja y media actividad, de forma que los de alta radiactividad se tienen que dejar en las piscinas de las propias centrales nucleares o en sus almacenes temporales en seco. Por esta razón, España desembolsa a diario 60.000 euros para almacenar de forma temporal sus residuos nucleares en Francia.

A pesar de este ahorro, el ATC implicará una inversión de «aproximadamente unos 800 millones de euros», aunque, según Soria, también ayudará a crear empleo y riqueza.

La razón de su ubicación; que se «llegó a un acuerdo con la presidenta de Castilla La Mancha, Dolores de Cospedal». Además, el Ayuntamiento de Villar de Cañas apoya el proyecto y la localidad ya había sido seleccionada como uno de los posibles emplazamientos por el anterior gobierno, junto con otros siete que cumplían el 100% de los objetivos».

Como era de esperar, la construcción del ATC está generando numerosas protestas. Se calcula que entre mil y cinco mil personas se concentraron en Villar de Cañas este fin de semana para mostrar su rechazo al ATC. Así mismo, Ecologistas y partidos como Izquierda Unida y Equo, califican que esta decisión ha sido tomada por razones políticas, sin tener en cuenta la opinión ciudadana, y con gran rapidez, solo nueve días después de la toma de posesión cuando el partido no se había pronunciado sobre esta cuestión durante siete años.

Fuente: Energíadiario.com

En lo que va de 2012 ya hemos pagado a Francia casi 1,5millones de euros por la gestión de residuos nucleares

Residuos nuclearesSi hace un tiempo ya te contábamos en Efimarket que la energía eólica es más barata que la nuclear, ahora podemos añadir otro argumento económico más que juega en favor de las energías limpias, y es que la gestión de residuos nucleares nos sale a los españoles por un pico.

Según datos publicados por Enresa, España ha ya pagado a Francia casi un millón y medio de euros en 2012, es decir, 64.900 euros diarios por el retraso en el retorno de los residuos nucleares de la planta de Vandellós I (Tarragona). La penalización se comenzó a pagar el 31 de diciembre de 2010, fecha en la que España debería haberse hecho cargo de este material. En total, deben volver 13 metros cúbicos (84 unidades) de residuos de alta actividad vitrificados y 666 de media actividad de combustible gastado de la nuclear Vandellós I, enviado a reprocesar a Francia.

Enresa ha explicado que el acuerdo señala que cuando se disponga de un almacenamiento en España y hayan retornado los residuos de Vandellós se realizaría “una regularización de cuentas”, restando de la cantidad total penalizada los costes que presente la empresa pública francesa Cogema en concepto de almacenamiento (inversiones y operación) y otras actividades conexas contratadas por ésta a terceros. En la actualidad, los residuos españoles se encuentran en el almacén nuclear que la empresa Areva posee en La Hague (Normandía).

Fuente: Energía Solar y Desarrollo Sostenible

El propósito del Gobierno es evitar subidas en la luz… aunque no las descarta

Ministro EnergíaNosotros ya sabemos como funciona esto: en política nadie suele decir las cosas abiertamente. El lenguaje utilizado por los políticos es evasivo y cuidado, pero si te fijas un poco y eres capaz de leer entre lineas, puedes obtener mucha información, y por eso ya te adelantamos que el recibo de la luz seguirá subiendo, lamentablemente, en 2012.

El nuevo ministro de Energía (entre otras) ha hablado en relación a la factura de luz que pagamos los españoles, y aunque ha dicho que la intención es no subirla, nos queda un regustillo de certeza de que esto no va a ser así. Y es que enseguida apeló a la incertidumbre del precio del petroleo, a la mala situación de los mercados..-

Soria indicó, en declaraciones a TVE recogidas por Servimedia, que «de momento ha subido» el recibo, pero aclaró que éste no depende sólo de la actuación del Gobierno, sino también del resultado de la subasta eléctrica.

En este sentido, indicó que hay «incertidumbre» sobre el precio del petróleo y por ello habrá que «esperar a los acontecimientos» antes de posicionarse sobre si habrá o no subida en la próxima factura.

El titular de Industria insistió en que el recibo de la luz depende tanto de la subasta eléctrica como del coste de los llamados peajes, que es el coste de la producción y distribución de la luz y el pago del déficit tarifario.

Soria remarcó que «el mayor problema es el déficit acumulado», que en los últimos ocho años ha sido de 24.000 millones de euros, si bien subrayó que «es acaso más preocupante el ritmo de incremento de ese déficit, a 3.000 o 5.000 millones» por año. Por ello, el ministro indicó que el Departamento de Energía tiene «toda la prioridad» en dar solución «a este ritmo desaforado», para evitar «un problema financiero».

Preguntado por la próxima caducidad del bono social en el recibo de luz, se mostró partidario de que «haya precios distintos» para aquellas personas con dificultades económicas y éstas tengan un «régimen tarifario diferente».

En Efimarket te animamos a que equipes tu hogar con los mejores dispositivos de medición y control del gasto eléctrico y a que vayas pensando en la autoproducción de energía como solución a los problemas del modelo energético.

Energía nuclear

El ministro abogó por un «equilibrio» en el mix energético entre las energías renovables y las convencionales. «No podemos prescindir de ninguna fuente de energía que ahora mismo esté produciendo», dijo.

En este sentido, preguntando por la energía nuclear, destacó que no tiene sentido prescindir de ningún tipo de energía de «coste bajo». Sin embargo, el ministro indicó que «el Gobierno no tiene ninguna intención de autorizar ningún reactor nuclear más en España». «No creo que haya ninguna empresa dispuesta a hacer una inversión de esta naturaleza en España», agregó.

Fuente: La Información

Las primas a las renovables subirán cinco puntos este año

Panel solar y torre eólicaEl déficit tarifario será uno de los puntos claves dentro de la política energética de 2012 en nuestro país. No será extraño ver como las energías renovables reciben ataques a diestro y siniestro por parte de nucleares y conservadores, y siempre con las dichosas primas de fondo.

En Efimarket pensamos que los beneficios de cambiar nuestro desfasado modelo energético son inmensos. Para empezar, si confiaramos nuestra producción mayoritariamente a las renovables no seríamos dependientes de combustibles importados con precios fluctuantes y de una demostrada agresividad hacia nuestro Medio Ambiente. Por eso ponemos a tu alcance la mejor selección de productos relacionados con las formas limpias de producción de energía.

Lo que ocurre es que las primas al régimen especial, que incluyen cogeneración y renovables, se situarán en 2012 en 7.221 millones, según las previsiones de la Comisión Nacional de la Energía ( Glossary Link CNE) recogidas en su informe de análisis de la orden ministerial de revisión de peajes eléctricos en enero.

Esta cifra supone un incremento del 5% con respecto a la partida dedicada a este concepto en 2011, de 6.876 millones, así como de 207 millones de euros con respecto a la previsión realizada por el Ministerio de Industria.

En concreto, la prima equivalente de la fotovoltaica será en 2012 de 2.610 millones, frente a los 1.937 millones de la eólica, los 1.232 millones de la cogeneración, los 553 millones de la termosolar y los 264 millones de la biomasa.

El regulador también ha revisado al alza la estimación de 2011 tras advertir que el impacto de la limitación de horas con derecho a prima de las plantas fotovoltaicas será «significativamente inferior al esperado». Además, se han revisado al alza las primas equivalentes recibidas por los cogeneradores.

Para 2012, la CNE no solo prevé que el recorte fotovoltaico sea de nuevo inferior a lo previsto, sino que también constata la entrada de nuevas plantas termosolares que duplicarán la electricidad generada con esta tecnología y elevarán la partida destinada a primas.

Por otro lado, el regulador recoge en su informe varias propuestas de revisión de costes e ingresos del sistema eléctrico, entre las que figura la de que las renovables puedan financiarse con el dinero que se ingrese en las subastas de derechos de emisión de CO2 a partir de 2013.

Fuente: Hazte Sostenible

Las nucleares alargan su vida pese a Fukushima

Central nuclearLa industria nuclear no pasa por su mejor momento, eso es algo que queda claro echando un vistazo a la sección de energía y medio ambiente de cualquier noticiero. Las polémicas que tradicionalmente ha levantado a su paso se han visto acentuadas a raiz del accidente de Fukushima y las voces más críticas pertenecientes al ramo pro-renovables no dan crédito ante la prórroga concedida a las nucleares y ante las especulaciones  relacionadas con la apertura de nuevas plantas.

En Efimarket, como ya sabrás, somos partidarios de aprovechar el poder infinito e ilimitado del sol y del viento y estamos convencidos de que si se invierte en desarrollo de energías renovables, estas serán competitivas en un plazo muy corto si es que no lo son ya en algunos casos.

La industria nuclear continúa sumida en un fuerte estancamiento en términos globales. Los altos costes de sus inversiones económicas y la dificultad para recuperarlas (dados los largos y cambiantes ciclos económicos de estos proyectos), así como un cierto síndrome de Fukushima, son factores que juegan en su contra. La construcción de nuevas centrales nucleares es una excepción en los países occidentales. Actualmente, hay 64 centrales en construcción en todo el mundo, pero más de la mitad (el 55%) están en el mundo en desarrollo, y tres cuartas partes en China (27), Rusia (11), India (5) y Corea del Sur (5). En España, el Gobierno excluye la construcción de nuevas centrales y se inclina por prolongar su vida útil. La pretensión de revocar el cierre de Garoña –previsto para el 2013– y prolongar su funcionamiento hasta el 2019 se inscribe en esta línea. La prórroga de las centrales aparece como la mejor opción para mantener sus constantes vitales.

En todo el mundo, existen 437 reactores, que operan en 30 países. Hay siete centrales menos que hace diez años (aunque su potencia sube ligeramente). El sueño de cuantos imaginaban que la energía eléctrica pivotaría sobre la energía del átomo se ha desvanecido. El papel de esta fuente de energía está declinando, con un estancamiento que se prolonga desde 1990; actualmente aporta el 13% de la generación de electricidad. El accidente de Fukushima ha ensombrecido su futuro. Alemania decidió cerrar inmediatamente las centrales (8) que superen los 30 años de antigüedad. Suiza decidió suspender el proceso para aprobar tres nuevas centrales hasta revisar sus estándares de seguridad. Italia ratificó su renuncia (acordada en 1988). Y la autoridad de la seguridad nuclear de Francia ha anunciado, tras auditar las centrales galas, que deben hacerse inversiones de miles de millones de euros para obtener garantías de seguridad.

En la UE, entre los proyectos que han sido citados para invocar el renacimiento nuclear está la planta de Olkiluoto, en Finlandia, de tecnología francesa, aunque la instalación, iniciada en el año 2005, ya lleva un retraso de cuatro años y su presupuesto se ha incrementado un 97%. Francia (1), Bulgaria (2) y Eslovaquia (2) son las otras naciones europeas que promueven centrales nucleares.

El Reino Unido mantiene su plan para apoyar la energía nuclear, pero con precios regulados, como se hace con las energías renovables, para garantizar los beneficios y permitir que obtengan una ventajosa financiación. «Pero aun así, eso tampoco anima a los inversores», explica Jordi Ortega, investigador de la Universidad Carlos III.

La prórroga en el funcionamiento de las centrales nucleares tiene como principal referencia a Estados Unidos, que ha renovado el funcionamiento a 59 reactores hasta 60 años. En EE.UU., el parón ha sido espectacular. Desde 1973, sólo se ha levantado una central (Watts Bar 1, en 1996). Actualmente hay una en construcción (Watts Bar 2, iniciada en 1972 pero congelada en 1985); y del plan de apoyo de la era Bush sólo quedan dos proyectos que esperan la autorización final, al reducirse el apoyo en los créditos garantizados.

Alemania, tras el accidente de Fukushima, además de cerrar sus ocho instalaciones nucleares más viejas, decidió establecer el calendario de cierre antes del 2021, con lo que tendrán una media de vida de 32 años. Además, se ha previsto una tasa para que parte de los beneficios se destine a fomentar las energías renovables.

La revitalización de la industria nuclear confiaba en el diseño de nuevos reactores destinados a ofrecer una energía más barata y más segura, pero esto ha sido «una falacia», según el estudio de Mycle Schneider. El informe señala que los costes de inversión en nuevas plantas aumentaron seis veces en la pasada década, por el largo y complejo proceso de diseño conceptual, revisiones y obtención de licencias. «Y el accidente de Fukushima sólo contribuirá a que sus costes se encarezcan más», se añade.

La construcción de una planta nuclear (1.00 MW) cuesta entre 4.000 y 5.000 millones de euros, mientras que si es de gas vale unos 2.000 millones de euros, admite María Teresa Domínguez, presidenta del Foro de la Industria Nuclear, que agrupa los intereses de sector.

En España, donde no existe moratoria nuclear, las compañías eléctricas podrían intentar construir nuevas centrales. Pero, «de momento, no han presentado ninguna solicitud», admite María Teresa Domínguez. La prioridad del sector (y también del Gobierno) es, sin duda, prolongar los periodos de operatividad.

De hecho, en España no se precisa más electricidad, pues existe un parque de generación eléctrica sobredimensionado. La punta de demanda eléctrica alcanza los 44.000 MW, mientras que la potencia instalada tiene 103.000 MW tras el fuerte desarrollo de las plantas de ciclo combinado y el boom de la eólica.

«Las plantas nucleares, o bien se levantan con ayuda del Estado o no se pueden hacer, y esa pretensión es contradictoria con el discurso liberal con el que se presentan sus partidarios», sostiene Javier García Breva, presidente de la Fundación Renovables.

Pese a que en nuestro país no hay ningún proyecto nuevo en marcha, sus partidarios ven necesario planificarlas a medio y largo plazo, pues, de media, se precisan unos diez años hasta que los proyectos se plasman. «No sería ilógico pensar que España iniciase la tramitación de nuevas centrales, pues, si se inicia un periodo de crecimiento económico, en el plazo de 10 o 15 años, deberíamos tener en el mix energético alguna unidad más», agrega la presidenta del Foro Nuclear.

Jaume Morron, experto en energía, estima que el accidente de Fukushima simboliza la repercusión de un suceso nuclear. «Algo que tenía un valor de miles de millones de dólares se convierte en una rémora. Se necesitarán 20 años para desmantelar las instalaciones y 100 años para recuperar el emplazamiento. El Gobierno nipón estudia nacionalizar la empresa Tepco», afirma. Morron considera relevante que la empresa ABB (de bienes de equipo nuclear) renunciara hace un decenio a las inversiones en la industria nuclear, algo que anunció también Siemens recientemente, mientras que juzga sintomáticas las pérdidas económica de Areva, la multinacional francesa.

Otros expertos, como Jordi Ortega, destacan que la hoja de ruta trazada por la UE en materia energética para el 2050 incluye algunos escenarios en los que la energía del átomo resulta casi irrelevante en 40 años.

De hecho, la prórroga de la vida de las centrales nucleares es la única salida de la industria para enfocar su futuro desarrollo. Para mantener el mismo número de plantas en operación, se necesitarían finalizar 18 reactores antes del 2015, lo que significa conectar a la red una planta cada tres meses en la próxima década y otras 191 unidades en la siguiente década: una cada 19 días. ¿Lo conseguirá el sector? Las restricciones en la fabricación, las exigencias crecientes de seguridad adicional, las dificultades de provisión de uranio, la escasez de expertos y los riesgos de proliferación nuclear son factores que siembran muchas dudas, dice García Breva. En la UE, entre el 2000 y el 2010, las fuentes de generación que crecieron más fueron el gas (118.192 MW adicionales), la eólica (74.414 M) y la fotovoltaica (26.427), mientras que bajaron la nuclear (7.594 MW), el carbón (9.504 MW) y el fuel (13.165 MW).

Fuente: La Vanguardia

Informe 2011 de Red Eléctrica

Ya tenemos los datos provisionales del magnífico informe que realiza Red Eléctrica de España cada año. A continuación os mostramos los datos más significativos:

  • La demanda anual de energía eléctrica ha registrado un descenso del 1,2%.
  • La demanda anual de energía eléctrica en los sistemas extrapeninsulares se ha mantenido en los niveles del año anterior, con un crecimiento conjunto de apenas un 0,1% .
  • El volumen de demandase ha situado en 255.179 GWh, similar al de 2006.
  • El máximo de potencia se registró el 24 de enero: 44.107 MW (1,7% inferior al máximo histórico de 2007).
  • El máximo de energía se registró el 25 de enero: 884GW (2,5% inferior al máximo histórico de 2007).
  • La potencia instalada aumentó en 1.879MW, un 1,9% más que el año anterior.
  • El 93% de ese aumento de potencia proviene de renovables.
  • Las reservas de los embalses terminaron el año al 54%.
  • El producible hidráulico se situó en 22.954GWh, un 18% menos que en 2010.
  • Las centrales de carbón duplicaron su producción.
  • La energía fotovoltaica creció un 26% y la termoeléctrica un 193%.
  • Los ciclos combinados cayeron un 22%.
  • La nuclear ha copado el 21% de la cobertura de la demanda, por el 19% de los ciclos combinados, el 16% de la eólica, el 15% del carbón y el 11% de la hidráulica.
  • Las renovables han cubierto el 33% de la demanda en su conjunto, tres puntos menos que en 2010 debido a la bajada de la hiráulica.
  • El 6 de noviembre se produjo el record de cobertura de la demanda por parte de la eólica con un 59,6%.
  • Se han registrado un 25% más de emisiones de CO2 que en 2010, debido al aumento en el uso de carbón.
  • España ha importado 6.105 GWh netos, un 27% menos que el año anterior.
  • Respecto a las infraestructuras de transporte, durante el 2011 se han puesto en servicio 1.705 km de circuito de los que 1.446 km corresponden al sistema peninsular.

En Efimarket abogamos por un uso responsable de la energía y ponemos a tu alcance la mejor selección de productos eficientes.

Fuente: Red Eléctrica

La energía eólica es más barata que la nuclear

Torres EólicasEn medio del clima de tensión ante la decisión del nuevo Gobierno de prolongar la vida de la central nuclear de Santa María de Garoña, en Efimarket nos gustaría hacer una reflexión acerca de cuanto hay de cierto en la afirmación por parte de los defensores de las formas de producción de electricidad convencionales de que la energía nuclear es más barata que las energías renovables.

El actual Ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, justificó la medida de la prorroga a Garoña basándose en la afirmación de que la energía nuclear producía con un menor coste. Esta afirmación es un poco tramposa, porque lógicamente, ahí no se están teniendo en cuenta los costes de implantación de la central. De hecho, llevamos bastante tiempo escuchando a gente bastante desinformada hablando a colación del tema en diferentes medios informativos y mesas redondas de debate.

Si hacemos un análisis de los costes de producir energía eléctrica podríamos llegar a conclusiones bastante sorprendentes.

Veamos: el coste de instalación de una central se cifra en 4000 millones de € por cada Gigavatio por los 950 millones de € del coste instalación de un Gigavatio de energía eólica.

De acuerdo que hay una diferencia de horas de funcionamiento, y es por ahí que se escudan muchos detractores cuando afirman que la eólica no vale cuando no hay viento, pero si hacemos números, una nuclear funciona unas 7.750 horas anuales, que son todas las horas del año menos las requeridas por paradas técnicas. Mientras tanto, un parque eólico produce durante, en el peor de los casos, 2200 horas anuales. Sin embargo, como podemos instalar con la misma inversión 4,21 Gigavatios de eólica por cada Gigavatio de nuclear haciendo un sencillo cálculo, vemos que obtenemos para una misma inversión:

Nuclear: 1Gw x 7750h = 7750Gwh

Eólica: 4,21Gw x 2200h = 9262Gwh

Es decir, que con una misma inversión producimos un 19,5% más de energía con la fuerza del viento, que para más inri es un combustible limpio, gratis e inagotable. De hecho, en este sencillo análisis no se han tenido en cuenta gastos de combustible (uranio que importamos) y de gestión de residuos que decantarían más todavía la balanza a favor de la eólica.

Si hacemos una comparativa similar entre la nuclear y la energía fotovoltaica, vemos que la energía proveniente del sol si que es más cara que la nuclear, aunque no cien veces más cara como hemos llegado a escuchar en alguna declaración.

La energía fotovoltaica tiene un coste de instalación de 2600 millones de € y unas 1600 horas de producción en algunos sitios del levante. Con estos datos vemos que con una misma inversión en energía solar produciríamos sobre el 33% de lo que produciríamos con la nuclear. De todas formas, esta tecnología tiene la ventaja de presentar un amplio margen de mejora que le hace ir recortando diferencias a grandes pasos con sus competidoras. De hecho se espera que en 3 o 4 años la energía solar equipare su competitividad a la de las otras formas de producción.

Aparte de este pequeño análisis, cabe destacar que ni la solar ni la eólica tienen los riesgos que conlleva la nuclear, y es que parece que la memoria del hombre es muy corta y miramos el reciente desastre de Fukushima desde la distancia y la indiferencia, como si hubiesen pasado mil años de aquello y como si no nos pudiera  pasar nunca a nosotros.

La conclusión que se puede extraer de todo esto sin miedo a equivocarnos ha de ser que las energías renovables son la apuesta de futuro, y en el caso de la eólica de presente, y que con ello haríamos de nuestro sistema energético un sistema independiente y seguro, pasando a depender de combustibles gratuitos, limpios y ubicuos.

En Efimarket, basamos nuestra política en el ahorro y la eficiencia energética y apostamos por un mundo mejor donde sea posible aprovechar como es debido el poder infinito que nos ofrecen el sol y el viento.

Fuente: Noticias Positivas