Estamos de acuerdo en la necesidad de reducir el consumo energético y logar un ahorro económico a final de mes. Pero llegados a este punto nos preguntamos, ¿Cómo puedo averiguar qué aparatos son los que más consumen? ¿Cómo puedo medir con exactitud lo que me cuestan? ¿Qué tengo que hacer para ahorrar energía? Todas estas cuestiones las vamos a resolver en este nuevo artículo de la serie Eficiencia Energética y Ahorro en el hogar, que va a formar parte de la GUÍA EFICIENCIA ENERGÉTICA EFIMARKET.COM.
El estudio de nuestro consumo energético debería empezar por recolectar los recibos de energía eléctrica, gas y agua, tal y como procedería un gestor energético. Es recomendable disponer de los datos de un año para obtener una media de consumo y analizar la energía consumida en invierno y verano, épocas en las que se gasta más. Si no disponemos de todos los recibos, podemos acudir al historial de consumo que aparece en la factura (ver artículos sobre la factura eléctrica y la factura de gas).
Del recibo podemos obtener un consumo medio en kWh (tanto de gas como de electricidad) y en metros cúbicos para el agua. Recomendamos calcular también las medias de las estaciones (primavera, verano, otoño, invierno) para diferenciar los consumos propios de cada temporada (calefacción, aire acondicionado, etc).
Una vez que sabemos la energía que gastamos, debemos descubir qué aparatos son los responsable de la mayor parte del consumo, para tratar de reducir la factura si es posible y lograr un ahorro energético en el hogar. En primer lugar miraremos la placa del aparato, donde encontraremos el valor de la potencia. Tanto si el aparato es eléctrico o térmico, la potencia viene reflejada en kilovatios (kW). Si nuestro aparato es antiguo y no tiene placa, averiguaremos el modelo y buscaremos por Internet algún catálogo antiguo o referencia. Si no lo encontráis, podéis recurrir a nosotros y trataremos de averigurarlo, nos convertiremos en vuestros asesores de gestor energético.
Es importante saber que la potencia eléctrica que aparece en la placa es la máxima del aparato, por lo que no es tan fácil determinar la energía consumida. Por ejemplo, en el caso de una bombilla de 50W, la energía consumida se obtiene multiplicando esos 50W por las horas de funcionamiento (por ejemplo 6 horas), obteniendo un valor de 300 vatios hora (Wh).
Sin embargo, en el caso de los electrodomésticos y otros aparatos, la potencia no es constante (por ejemplo en ordenadores gasta más si está grabando un CD-ROM) ni continua (por ejemplo los aparatos de climatización y los frigoríficos, que se conectan y se desconectan).
Para determinar el tiempo de funcionamiento de los aparatos con funcionamiento intermitente, podemos vigilar cuándo están encendidos y el tiempo que están. Por ejemplo, los frigoríficos tienen un modo de funcionamiento de unos 15 minutos, pero varía según la época del año (el calor que hace), si está más o menos cargado, etc. Es importante tener en cuenta que un frigorífico pierde mucha energía cuando se abre la puerta, sobre todo si está casi vacío, debido a que los alimentos almacenan el frío.
En cuanto a la potencia que consumen realmente, se puede calcular con un poco de esfuerzo y una calculadora. Si tenemos accesible el contador (agua, luz o gas), podemos poner en marcha un determinado aparato y comprobar la energía que consume.
Por ejemplo, en los contadores antiguos de electricidad podemos ver una rueda que gira contabilizando la energía. Suele venir reflejada la conversión de vueltas a energía (del orden de 300 vueltas cada kWh consumido). Contando las vueltas que da la rueda en un periodo de tiempo, podemos estimar el consumo en kWh del aparato. Es necesario asegurarse de que solamente está encendido este aparato, desconectando cualquier otro aparato que pueda ponerse en funcionamiento.
Este método de medir la energía no cabe duda de que requiere dedicar tiempo y esfuerzo, pero puede servir de primera aproximación a nuestra auditoría doméstica. También hay que reconocer que puede llevarnos a errores importantes, pues es imposible estar siempre pendiente del «comportamiento» de cada electrodoméstico. En ocasiones el trabajo del gestor energético no es fácil.
Nos queda todavía mucho de qué hablar sobre las auditorías de eficiencia energética en el hogar, así que haremos una segunda entrega donde comentaremos entre otras cosa la utilización de medidores electrónicos de consumo (en sustitución de la metodología «manual» que hemos explicado) y cómo proceder una vez que tengamos hecho el estudio.
Esperamos que os haya gustado esta primera entrega. En breve publicaremos la segunda parte, en el ámbito de la Guía Eficiencia Energética Efimarket.com.
Imagen cabecera. Fuente: Bungalow por Petr Kratochvil
Imagen artículo. Fuente: Monitor de la computadora aislada por Petr Kratochvil
¿Podéis decir cuanto consume más o menos una plancha? Cada vez que enciendo la mía salta la luz. Y es nueva! Gracias.
Hola Laura,
Tu problema no es exactamente el consumo de la plancha (los kilovatios-hora del recibo), sino la potencia (los vatios). Una plancha oscila entre los 1000W y los 3000W de potencia. Puedes mirar la potencia en una etiqueta que llevará la plancha pegada. Te aparecerá algo así como «230V 50Hz 1600 W».
Cuando formalizas un contrato con la compañía eléctrica eliges una potencia máxima (ver el artículo Entender la factura eléctrica paso a paso), apartado «Potencia contratada»).
Si tu plancha es de las de más potencia, y tienes contratada por ejemplo una potencia de 3300W, que es lo normal en viviendas sin aire acondicionado, la plancha se lleva casi toda la potencia. Si en ese momento se conecta el frigorífico o cualquier otro aparato, puedes superar la potencia máxima y te salta la luz (salta el ICP).
HOLA AMIGOS, ME GUSTARIA HACER UNA AUDITORIA AMBIENTAL A MI CASA PERO NO SE HACERLO, ¿ALGUIEN HA HECHO ALGUNA? Y SI ES ASI ¿ME LA PONDRIA ENVIAR ALGUIEN PARA VER COMO SE HACE? A [email protected] MUCHAS GRACIAS
Estimado Jose,
¿Te refieres a una auditoría energética? Una auditoría energética consiste en conocer al dedillo cuánta energía consumes y en qué aplicaciones se consume. Una vez contabilizados y analizados estos consumos, se buscan soluciones para reducir el impacto de esos consumos en el total. Explicar cómo se hace esto es la intención del 2º artículo de esta serie, que sacaremos a la luz pronto. En cualquier caso, para realizar este procedimiento correctamente es necesario un aparato de medida com el Efergy e2. Si aun no dispones de el, quedamos a tu disposición para explicarte qué es y cómo funciona. Una vez lo conozcas un poco mejor comprenderás lo fácil que es realizar una auditoría energética en el hogar y cómo conseguir ahorros de hasta el 50% en tu factura implantando una serie de sencillas medidas. Ponte en contacto con nosotros si necesitas más información vía Chat, teléfono o email. Un saludo!