La nueva subida de la luz de mañana podría superar el 4%

consejo ministros reforma energetica - efimarketLos precios de la electricidad en el mercado mayorista, los cuales influyen en el resultado de la subasta Cesur, anticipan una fuerte subida de la tarifa de último recurso (TUR). El precio del pool cerró ayer en 53,54 euros/MWh, frente a los 51 euros MW/h del trimestre anterior. Durante el mes de junio el precio en dicho mercado ha llegado a superar los 60 euros MW/h.

El resultado de la subasta que se celebra hoy determinará, a su vez, el precio de la energía en la factura de la luz que se revisará a partir de julio. Dicha factura incluirá también una subida de la tarifa de acceso (o peajes), que es la parte regulada de la misma y no puede bajar pues a través de ella los consumidores pagan el déficit de tarifa a las cinco grandes compañías eléctricas.

En declaraciones a un medio radiofónico, el Ministro Soria ha dejado ver que la subida de la tarifa rondará valores entre el 4% y el 5%. 

Esta semana es clave para el sector energético y se espera que el Consejo de Ministros del viernes apruebe nuevas medidas, esencialmente de tipo fiscal, para poner freno al déficit de tarifa.

La llamada reforma energética va a coincidir con la revisión de la tarifa del tercer trimestre. La primera fue aprobada el 30 de marzo. Sin embargo, en esta ocasión el Gobierno no va a tener a su favor una caída de los precios de la energía, tal como ocurrió con la subasta Cesur de marzo. Por razones coyunturales, el resultado de las pujas en los primeros meses del año es a la baja, lo que no suele ocurrir en el segundo semestre.

Además, todo apunta a que en marzo las empresas no presionaron los precios al alza para dejar margen al Gobierno para abordar una reforma, que, finalmente, no fue de su agrado. Fuentes del sector aseguran que en esta ocasión no van a dar ningún margen: los posibles recortes que el Ejecutivo les pueda aplicar los compensarían con la subida del precio de la energía que nacen en la Cesur.

Nerviosismo

Para el sector energético esta será una semana de nervios. El que más y el que menos teme una tasa, caso de la generación, o algún tipo de recorte. El suspense es mayor si se tiene en cuenta la falta de interlocución con el Gobierno que denuncian en todos los subsectores.

Fuente: Cinco Días

El Gobierno aprobará el viernes la reforma energética, aumentando además el precio de la luz

reforma energetica - efimarketEl Gobierno aprobará el viernes de esta semana tanto la reforma energética, con la que espera solucionar el problema del déficit de tarifa, como la revisión del precio de la luz para el tercer trimestre del año, en la que los ingresos del sistema eléctrico deberán ser suficientes para cubrir los costes, lo que implicará seguramente una nueva subida del recibo de la luz en julio.

En su reforma energética, el Gobierno incluirá medidas para detener el crecimiento del déficit de tarifa y, por otro lado, dar una solución a la deuda acumulada de 24.000 millones, que deben devolver los consumidores.

La absorción del desajuste obliga a nuevos esfuerzos a los tres principales actores del sector, que son los consumidores, las empresas y el Estado. Los consumidores ya han soportado subidas del 60% en el recibo en los últimos cinco años, mientras que las eléctricas ven amenazados sus ‘rating’ por la deuda que financian y el Estado no tiene capacidad para contribuir a la solución.

Aun así, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo ha advertido de que las medidas adoptadas en marzo fueron insuficientes y de que hay que poner coto a un problema que crece a un ritmo anual de 4.000 millones. Hace apenas tres meses, Industria elevó un 7% las tarifas para asumir las sentencias del Tribunal Supremo y recortó costes por 1.700 millones de euros.

Entre las medidas que estudia ahora el Gobierno figura la de gravar los combustibles con un ‘céntimo verde‘ para financiar las renovables, lo que procuraría ingresos suficientes para aliviar el coste de las primas que, a través de la tarifa, se dedican a estas tecnologías.

El ministro José Manuel Soria también ha aludido a un aumento en la «imposición indirecta a la generación», mientras que en su departamento se trabaja en una reducción a entre 3 y 5 kilovatios (kW) del umbral de potencia con derecho a tarifa regulada, lo que obligaría a más de 9 millones de consumidores a salir al mercado libre.

Las eléctricas, que temen mayores recortes en partidas como la distribución, advierten de que, de los 18.500 millones de costes del sistema, 10.050 millones son subvenciones (7.600 millones en primas, 1.900 millones en extrapeninsulares, 500 millones para grandes consumidores y 400 millones del decreto del carbón), y que es ahí donde se debe recortar. Mientras, los operadores petrolíferos critican el ‘céntimo verde’ y recuerdan la alta fiscalidad que ya soportan los combustibles.

SUBASTA ELÉCTRICA.

Al margen de las decisiones que adopte el Gobierno, los expertos advierten de que será necesario elevar los ingresos del sistema y de que, para ello, no solo se elevará previsiblemente la fiscalidad, sino también la tarifa eléctrica.

El alcance de la próxima revisión tarifaria a partir del 1 de julio dependerá en parte de la próxima subasta de electricidad entre comercializadoras de último recurso (Cesur), que se celebrará este martes y que servirá para fijar el término correspondiente a la energía dentro de la tarifa de la luz.

El resultado de estas subastas tiene un peso cercano al 50% sobre la Tarifa de Último Recurso (TUR), mientras que el otro 50% corresponde a los peajes eléctricos, que sufragan los costes regulados del sistema eléctrico.

La anterior subasta, celebrada en marzo, se cerró con bajadas del 7%, si bien la TUR subió finalmente un 7% para recoger un incremento de peajes cercano al 23% con el que el Gobierno cumplía las sentencias del Supremo y garantizaba el equilibrio entre costes e ingresos.

Fuente: Europa Press

El MIT desarrolla una célula solar de carbono que genera energía a partir de luz infrarroja

MIT desarrolla celula de carbono que capta infrarrojos - efimarketActualmente 40% de la energía solar que llega a la Tierra se encuentra en la región cercana al infrarrojo del espectro, y mientras la mayoría de los dispositivos fotovoltaicos son incapaces de aprovechar esta energía, un equipo en el MIT ha creado una célula solar de carbono que absorbe esta la radiación infrarroja de calor. El equipo cree que estas células solares de carbono conducirán al desarrollo de nuevas células solares combinadas, que utilizan tanto tradicionales células de silicio y de las nuevas células de carbono para generar aún más energía.

Al igual que muchos avances recientes de la energía, la respuesta está en los nanotubos de carbono. El equipo ha utilizado nanotubos y una exótica forma de carbono llamada C60 para hacer su nueva celda. En la revista Advanced Materials, profesor de Ingeniería Química en el MIT y autor principal Michael Strano, dijo: «Es un tipo totalmente nuevo de la célula fotovoltaica».

Por supuesto, para hacer que la célula sea tan eficientemente como sea posible, los nanotubos tienen que ser muy puros, y de un tipo uniforme. La  capa única de las hasta ahora células fotovoltaicas de nanotubos contruidas sólo utilizan una capa de polímero para mantener los nanotubos en la posición y recoger los electrones que golpean y se dispersan cuando absorben la luz solar. Sin embargo, el nuevo proceso prevé recubrimientos adicionales añadidos con el fin de evitar la degradación con la exposición al aire permitiendo que la nueva célula fotovoltaica de carbono sea tan estable como sea posible.

Debido a que el material es transparente a la luz visible, tales células de carbono se pueden colocar sobre las células solares convencionales para capturar la radiación infrarroja. Estos dispositivos tándem serán entonces capaces de aprovechar la mayor parte de la energía solar. Sin embargo la tecnología está lejos de estar a punto. En sus notas de investigación, Strano señala sus modelos actuales… ¡sólo tienen una eficiencia de conversión de energía de un 0,1%!

Visto en Inhabitat

 

El otro rescate: la reforma eléctrica

reforma electrica - efimarketReproducimos a continuación el interesante artículo de Carmen Monforte publicado en el diario económico Cinco Días el pasado viernes. En el nos descubre el oscuro panorama oculto tras la nube de humo de las noticias económicas, pero que sin embargo tiene un paralelismo curioso. De hecho, el enorme déficit tarifario eléctrico se asemeja en cuanto a dimensiones a la deuda de la banca debida a la burbuja inmobiliaria. Pero ya sin más os dejamos con el magnífico artículo.

Según el diccionario de la RAE, una reforma es «aquello que se propone, proyecta o ejecuta como innovación o mejora en algo». Si nos atenemos estrictamente a este significado, la llamada reforma eléctrica no puede ser considerada como tal (ni la aprobada en marzo ni la segunda fase prevista para este mes), sino como una sarta de medidas para que los consumidores eléctricos, los contribuyentes y, en menor medida, las compañías del sector paguen pura y simplemente el déficit de tarifa acumulado, que rondaría este año los 29.000 millones de euros. Pero sin una verdadera reforma que racionalice el sistema a través de una revisión profunda de los costes y de las subvenciones del cambalache en que se ha convertido la tarifa de acceso, el mal de fondo persistirá. Díganlo Soria o Montoro.

Y es que se veía venir: el déficit acumulado en la última década, que se podría haber evitado con subidas asumibles en años de bonanza económica, y que habrían puesto coto al descontrol de la demanda y del exceso de capacidad, lo tendrán que pagar los consumidores en el peor de los momentos posibles, con el fantasma de un rescate a España rondando en el ambiente. La oportunidad se perdió hace tiempo, tanto para los consumidores como para las grandes eléctricas, que financian la deuda en tanto se tituliza en el mercado.

Además de las subidas de impuestos y de los recortes salariales o sociales de todo tipo aprobados y previstos para equilibrar las cuentas públicas que sangran por el lado de los ingresos, los ciudadanos van a tener que afrontar el pago de un déficit tarifario que poco o nada tiene que ver con la actual crisis financiera, sino con políticas electoralistas aplicadas en los últimos años. Ningún Gobierno se atrevió a subir suficientemente las tarifas para cubrir de verdad los costes reconocidos por ley ni tampoco a recortar dichos costes, a lo que se oponían los distintos grupos de presión.

El resultado: una deuda disparatada de los consumidores con las eléctricas, a la que estas tienen derecho y que han reclamado por vía judicial (solo la que ha excedido los límites legales). Así, solo por las refacturaciones de consumos desde octubre impuestas por el Tribunal Supremo al Gobierno, la tarifa de acceso subió en abril un 25%, un coste que se fraccionará en los recibos de la luz hasta finales de año. También las eléctricas, que aceptaron en su día el endiablado sistema consistente en esconder las subidas debajo de una alfombra y aplazar su pago a través de un sistema de titulización que, al contar con el aval del Estado, se ha dado de bruces con la crisis de la deuda soberana que dificulta la colocación de la deuda eléctrica.

En dos fases

Así las cosas, el Gobierno aprobó el 30 de marzo un real decreto-ley con medidas con las que el sistema eléctrico lograba 3.240 millones de euros. De estos, 1.640 millones corren por cuenta de los clientes (una subida de las tarifas de 1.580 millones y un recorte de los pagos por interrumpibilidad de la gran industria de 60 millones) y otros 940 millones por las eléctricas, que verán recortados los ingresos por la actividad de distribución en 690 millones. La cantidad restante, 660 millones, procede de supuestos remanentes del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) y de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), entre otros.

Consciente de que estas medidas apenas sirven para cubrir el descontrol del déficit de este año, el Ministerio de Industria prometió un segundo capítulo de «reformas» a aprobar en la segunda quincena de junio que irá acompañada, con total seguridad, de una nueva subida de la tarifa de acceso y, muy probablemente, de la tarifa de último recurso o TUR (la primera es la mitad de la segunda, que se completa con el precio de la energía).

No en vano, el martes de la semana que viene se celebra la subasta Cesur, en la que se determinará dicho precio en la factura del tercer trimestre. En función del resultado de la puja, el Gobierno jugará con una subida de tarifas, que introducirá en el proyecto de ley de la falsa reforma que se prevé aprobar en el Consejo de Ministros del viernes 29. A falta de un borrador y en medio de la confusión que generan las declaraciones del ministro de Industria, José Manuel Soria, todo apunta a que las medidas con las que el Gobierno pretende frenar el déficit de tarifa serán, esencialmente, de tipo fiscal. De hecho, quienes más trabajan estos días en el proyecto son los técnicos del Ministerio de Hacienda, señalan fuentes del sector.

Las medidas tributarias se centran en la aplicación del llamado céntimo verde (entre cuatro y cinco por litro de carburante) como un recargo del impuesto de hidrocarburos. Por esta vía se prevé recaudar unos 1.500 millones de euros que, en teoría, irían destinados a costear la promoción (primas) de las energías renovables. Sin embargo, la medida encierra un peligro: al ir a a las arcas públicas, y dados los graves problemas presupuestarios, no hay seguridad jurídica de que se destine a la tarifa.

Otra medida, la más confusa de todas es «el incremento de la imposición indirecta a la generación», según palabras de Soria. Dado que el ministro descartó que se tratara del IVA, solo cabría pensar en el de la electricidad, que ingresan las comunidades autónomas. Sin embargo, este tributo no grava la generación sino el consumo. En este punto de la madeja, hay quien considera que Soria se refería a los peajes que, desde diciembre de 2010, tienen que pagar las generadoras por usar las redes eléctricas. Sin embargo, ni es un impuesto indirecto ni se puede incrementar, pues lo que ahora pagan las compañías (0,5 euros por MW) es un límite fijado por la Unión Europea.

Negra situación financiera

Con todo, lo que preocupa a las empresas es la tercera medida que, sin concretar, consistiría en una tasa general sobre la producción, que variaría según las distintas tecnologías. Las empresas, que siguen lamentando la falta de interlocución con un Gobierno autista, consideran que este recorte de ingresos supondría «la puntilla» para un sector cuyas calificaciones crediticias rozan, según los casos, el bono basura o están en perspectiva negativa.

Ello, unido a la paralización de las titulizaciones de la deuda tarifaria, agravará la situación de uno «de los pocos sectores que aún se estaba librando de la crisis», como subrayó en su día el alto ejecutivo de una de las eléctricas.

Fuente: Cinco Días

Competencia sanciona a Endesa con 5 millones de euros

sanciones a endesa - efimarketLa Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha impuesto a Endesa una multa de 5,475 millones de euros por traspasar al mercado libre, sin recabar su consentimiento expreso, a los clientes sin derecho a tarifa de último recurso (TUR) que estaban siendo transitoriamente suministrados por su comercializadora de último recurso.

La dirección de investigación de la CNC tuvo conocimiento de los hechos a través del expediente informativo que abrió la Comisión Nacional de Energía (CNE) y que le remitió en julio de 2010. Según el regulador energético, la citada comercializadora, denominada Endesa Energía XXI, habría cambiado los contratos de determinados clientes que se quedaron sin derecho a acogerse a la TUR (desde julio de 2009 solo tienen ese derecho los clientes con potencia contratada inferior a 10 kW), trasvasándolos a la comercializadora en el mercado libre del grupo Endesa.

El nuevo sistema de último recurso, que entró en vigor el 1 de julio de 2009, establecía un periodo transitorio para que los clientes que quedaban fuera de la TUR pudieran pasar, siempre con su consentimiento, al mercado libre. Entretanto, se les cobraba un recargo en la tarifa para incentivar su salida a dicho mercado.

El consejo de la CNC, en línea con lo solicitado por sus investigadores, ha acordado la imposición de una multa a Endesa por haber vulnerado el artículo 3 de la Ley de Defensa de la Competencia. Unas conductas que se enmarcan en el proceso de liberalización del suministro eléctrico y, en particular, del traspaso de los clientes con menor disposición al cambio al mercado libre.

El consejo considera en su resolución que esta conducta ha afectado a más de 300.000 clientes y es una «violación de normas que constituye un acto desleal que falsea la competencia y es susceptible de afectar al interés público«.

También a Iberdrola

La CNC había incoado otro expediente similar a Iberdrola, a raíz de una denuncia de Gas Natural. Dicho expediente se resolvió en febrero con la imposición de una multa de más de 10 millones por infringir el artículo 3 de la Ley de Defensa de la Competencia.

Estas prácticas y otras están extendidas al parecer entre las compañías eléctricas. Es normal que en un oligopolio estas poderosas compañías intenten barrer para casa siempre que puedan. Y a parte, están las presiones que el lobby eléctrico realiza sobre el Gobierno de turno, presiones con las que siempre consiguen sacar tajada a costa del consumidor.

Fuente: Cinco Días

El 88,8% de la electricidad de Brasil en 2011 se produjo a partir de fuentes renovables

Brasil produce un 88,8% de su electricidad de fuentes renovables - efimarketImpresionantes cifras las de Brasil. Cierto es que disponen de una de las regiones de la tierra más fértiles para la producción de biomasa, pero hay que reconocer que sólo con disponer del recurso, la electricidad no fluye de los campos a la red eléctrica. Brasil ha tenido que invertir fuertemente y durante décadas en políticas energéticas que favorecen la generación renovable.

Es conocida también la producción masiva de bioetanol para combustible de vehículos, disminuyendo así su dependencia del petróleo. Y lo mejor de todo es que de esta forma, además de reducir su dependencia energética exterior, genera puestos de trabajo e inversiones multimillonarias, en un país con gran crecimiento demográfico, que está siendo la gran locomotora americana a día de hoy.

Pero yendo al titular, hablemos exclusivamente de producción eléctrica, que es de lo que trata la noticia. Los datos preliminares del Informe de Balance Energético Nacional (BEN 2012) de la Empresa de Investigación Energética de Brasil (EPE) muestra que la friolera del 88,8% de la electricidad generada en Brasil durante 2011 provino de fuentes de energía renovables.

La energía eólica aumentó en un 24,2% en 2011. Esto era algo esperado, ya que se hizo evidente hacia mitad de 2011 que la energía eólica fue la forma más barata de electricidad nueva disponible, incluso más barata que el gas natural. También se realizaron grandes inversiones en proyectos de energía eólica en el país.

La electricidad generada a partir de biomasa de caña de azúcar disminuyó, pero se mantuvo en un nivel alto (44,1%), muy por encima del promedio mundial de 13,3%.

A continuación se muestra un poco más de información de la Secretaría Brasileña de Comunicación Social (SECOM):

La siguiente tabla muestra que la oferta interna de energía (la energía demandada total del país) en el 2011 subió un 1,3 por ciento en 2010, alcanzando 272,3 millones de toneladas equivalentes de petróleo (tep). Al mismo tiempo, el Producto Interior Bruto creció un 2,7 por ciento, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). El menor crecimiento de la demanda de energía en comparación con el PIB indica que Brasil gastó menos energía para producir la misma cantidad de bienes y servicios. La demanda de energía per cápita se situó en el 1,41 TOE en el año 2011, el aumento de aproximadamente el 0,5 por ciento desde 2011.

El consumo total de energía en Brasil, tanto por los individuos y las empresas, el aumento de un 2,6 por ciento respecto al año anterior, con un suministro interno correspondiente de 228,7 millones TOE, en 2011. Esto se asemeja a un equilibrio más estable entre la oferta y el consumo en 2011 hasta 43,7 millones TOE, en comparación con 2010, en la que el TEP fue de 45,4 millones de dólares.

Los resultados preliminares del Informe BEN 2012 están disponibles en www.ben.epe.gov.br .

Redacción Efimarket

Suicidio liberal. Cuando todo vale por ganar dinero.

no a la fracturacion hidraulica - efimarketReproducimos a continuación el artículo de opinión escrito por Guillermo Fesser, periodista conocido por su faceta en el duo Gomaespuma, que además es un firme defensor del medio ambiente y un ácido y certero columnista, y que fue publicado en el Huffington Post. En esta ocasión, el autor nos habla de cómo esta espiral liberalista está alcanzando metas que ni el mismo imperio estadounidense, abanderado del capitalismo actual, había logrado llegar aun. Sólo que son hitos de la barbarie y la destrucción medioambiental.

El Imperio hace aguas

«Hasta antes de ayer había dos USA. Los Estados Unidos de Adentro y los Estados Unidos de Afuera. Los de Adentro, aún con sus excesos de armas domésticas y sus gorduras diabéticas, probaron ser uno de los lugares más amables para vivir en la tierra. Los de Afuera, con sus intervenciones militares y sus vetos a la justicia internacional, una de las pesadillas más amargas de la historia. Nada nuevo. Las dos caras de una misma moneda. Siempre ha sido así. Japón protege sus bosques, pero esquilma los de Australia para construir casas de madera. España entera salió a la calle a defender la democracia mientras un gobierno socialista aprobaba la venta de tanquetas a Pinochet para disolver manifestaciones pacíficas en Chile. Tonto el último.

Pero ahora es distinto. El imperio ya no es solamente perverso en el extranjero. Por vez primera se autolesiona. Se envenena a sí mismo. Abandona definitivamente la búsqueda de felicidad sugerida por sus padres fundadores y se deja llevar por la doctrina liberal que les vendió Ronald Reagan, su padre demoledor, en la que todo vale, hasta el suicidio, si proporciona ingresos. Como si la América anglosajona quisiera demostrarle a Eduardo Galeano que también sabe abrirse sus propias venas.

El enemigo público número uno de USA se llama fracturación hidráulica y consiste en extraer gas natural del subsuelo a base de inyectar un veneno mortal que está fulminando los acuíferos. El conglomerado de intereses que anda detrás, Natural Gas Energy, invierte billones de dólares en publicidad para que el ama de casa crea que basta con practicarle un agujerito ecológico al terreno para embotellar limpiamente la inmensidad de combustible que se almacena a tres kilómetros de la superficie. En plan Barrio Sésamo, explican por televisión que el gas de la tierra se presenta como el del agua mineral, o sea en burbujas, y que a ellos se les ha ocurrido inyectar agua a presión para fracturar las rocas, juntar las infinitas pompas en una grande y conseguir así que salga todo por el mismo tubo. Para minimizar el daño medioambiental. Para rentabilizar la inversión. Para que América no dependa del petróleo que anda en manos de dictadores terribles. Así de claro. Así de bonito. Así de fácil. Y, tan buenos son ellos, que encima alardean de haber creado 9,2 millones de empleos a base de pinchar la tierra con esta acupuntura inocente.

Pero acabo de volver de Dimock, un pequeño pueblo anclado en las verdes colinas de Pensilvania, y la verdad resulta tremendamente más sucia. Descorazonadora. Los habitantes que almuerzan en Stables, la taberna local, no levantan la vista del plato. No sonríen. No intercambian palabras con sus parejas. Los pájaros que solían posarse en los cables de la luz a saludar con sus cantos a los viandantes han emigrado. El único sonido que queda en las calles es el de los cientos de camiones y excavadoras que van trillando el asfalto y abriendo cremalleras de barro entre los árboles del bosque para montar sus campamentos. El ruido incesante de motores y el nauseabundo olor a nafta se confunde con el cargo de conciencia de sus habitantes por haberle vendido al capital su alma. Un apocalipsis coronado por el rugido de unas llamas que emergen a bocanadas infernales de largas chimeneas, como alaridos de dragones en celo, y que le dan a este valle elegido del paraíso un sonido ambiente de aeropuerto internacional que no cuadra con sus granjas de caballos.

2012-06-02-Post1_Foto1_GuillermoFesser_UnvecinodeDimockPensilvaniacedesujardntraseroparaunagujeritodenada.FotoSAMLEVINE.jpg Un vecino de Dimock, Pensilvania, cede su jardín trasero para un agujerito de nada. Foto: SAM LEVINE.

Las compañías del gas ocultan que, para fracturar las rocas, necesitan millones de metros cúbicos de un agua que extraen sin piedad de los manantiales locales. Operación que desciende trágicamente el nivel de la capa freática y deja algunos pozos obsoletos de por vida. Si tu vecino cedió el terreno a los del gas por un puñado de dólares, puede que al girar el grifo de tu granja observes con sorpresa que ya no sale ni una gota. La mala noticia es que no volverá a salir jamás y, espera, que eso no es lo peor. Lo terrible es que en el líquido que te robaron por debajo y sin previo aviso van a disolver un montón de componentes químicos para inyectarlos a presión en el subsuelo. Algunos de ellos altamente contaminantes. Cancerígenos. Para que erosionen a conciencia la madre Tierra. Para que hagan daño abajo y le abran paso al gas; la energía limpia e independiente que crea empleos. El combustible que aflora a la superficie mientras por debajo el veneno encuentra los acuíferos profundos y elimina la vida.

Hasta que Dick Cheney fue vicepresidente en Estados Unidos todo el mundo tenía que respetar el Clear Water Act. Una ley de protección del agua potable que obligaba a todo hijo de vecino a declarar los componentes químicos que arrojaba al terreno. Para defender a los norteamericanos de la sed. Para que no volviera a pasar lo que ocurrió con el DDT que, entre otras cosas, se llevó los minerales que endurecían la cáscara de los huevos de águila y a punto estuvo de extinguirles el símbolo de su escudo. Pero Dick Cheney venía de dirigir Halliburton, la empresa que fabrica en exclusiva la maquinaria necesaria para extraer gas y, en nombre de la seguridad nacional, le hizo firmar a Bush una ley que exime a las petroleras de declarar los potingues que usan para extraer carburante. ¿Motivo? No hace falta ser muy listo para responder a esta pregunta. ¿Disculpa? Que la independencia energética es más importante que el daño medioambiental.

2012-06-02-Post1_Foto2_GuillermoFesser_LlamadegasenDimockPensilvaniaEEUU.FotodeSAMLEVINE.jpgLlama de gas en Dimock, Pensilvania, EEUU. Foto: SAM LEVINE.

Las tragedias personales se van multiplicando exponencialmente. Casos de leucemia. Aguas negras. Animales enfermos. Tierras de cultivo abandonadas. Aguas domésticas que silban al salir del grifo y explosionan al aplicarles la llama de un mechero. Historias terribles que, hasta antes de ayer, siempre ocurrían al sur del imperio. Porque el mismo Estados Unidos que prohibía a las fábricas de Texas arrojar vertidos al río Grande, contrataba unos kilómetros aguas abajo a factorías mexicanas que teñían de colores tóxicos el río Bravo. Pero hoy es distinto. El imperio, en lugar de avergonzarse de su política exterior y corregirla, se lanza a practicarla también en su propia casa. Materia muy novedosa para los psiquiatras.

En un universo cuya verdadera moneda de cambio ya no es ni el dólar, ni el yen, ni el euro, sino el vaso de agua, Estados Unidos destruye sus propios acuíferos. Y Obama no hace nada. Ya han pulverizado Colorado. Exterminan Pensilvania. Y, agazapados en Dimock, se preparan para asaltar Nueva York. Si lo hacen, pegarán un zarpazo a la naturaleza del que muy difícilmente la humanidad entera podrá recuperarse. Pero Cuomo, el gobernador de Nueva York, necesita crear empleos.»

Vía The Hufftington Post

Los consumos fantasma, responsables de más del 7% del consumo de los hogares

standby - efimarketEl consumo fantasma de los aparatos eléctricos -el que se produce cuando están aparentemente apagados pero conectados a la red eléctrica- «roba» anualmente entre el 7 y el 11 por ciento de la electricidad de los hogares.

Ese porcentaje del gasto eléctrico que absorben los pequeños electrodomésticos cuando se quedan en posición de reposo (standby) es por ejemplo superior al consumo de la refrigeración y equiparable al gasto energético de la lavadora.

Son, sobre todo, los aparatos que en el sector se conoce como «gama marrón«, las televisiones, los equipos de música, los dvd o los videojuegos, aunque algunos de la gama «blanca» como lavadoras o lavavajillas también incorporan esos pequeños pilotos que permanecen encendidos aunque el aparato haya dejado de funcionar.

A esos dos grupos se han sumado los teléfonos móviles que la mayoría de los ciudadanos dejan cargando durante toda la noche, lo que supone que estén enchufados muchas más horas de las que necesitan para completar su carga.

Las asociaciones de consumidores advierten

El portavoz de la FACUA-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, ha subrayado la importancia de ese consumo fantasma en los hogares y su repercusión en la factura eléctrica, y ha destacado la trascendencia y el ahorro que suponen los pequeños gestos como apagar por completo esos pequeños electrodomésticos.

En sus declaraciones, Rubén Sánchez se ha referido además a la subida del precio de la electricidad y a la necesidad que van a tener miles de hogares españoles de ajustar sus consumos para conseguir un ahorro significativo.

Ante la subida de las temperaturas y del inicio -oficial- del verano, algunas organizaciones han apuntado cómo algunos de esos pequeños gestos pueden contribuir a ahorrar energía, y entre ellos han apuntado una cifra: por cada grado de temperatura menos que se le pide al aparato de aire acondicionado el sobrecoste de la electricidad aumenta un 7 por ciento.

Según datos del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE), los hogares españoles consumen una media de 10.500 kilovatios -hora cada año, y los menos intensivos en ese gasto energético con los bloques de pisos localizados en el área mediterránea.

En el lado opuesto, como más «gastones», figuran las viviendas unifamiliares ubicadas en el interior peninsular, según la misma fuente, que ha precisado que de media las casas unifamiliares consumen dos veces más que los pisos.

De acuerdo a los datos del IDAE la práctica totalidad de los hogares españoles dispone de algún sistema de calefacción, de agua caliente sanitaria, equipamiento de cocina y varios electrodomésticos, y los aparatos con una menor penetración son los de aire acondicionado, presentes en sólo la mitad de los hogares.

De media, cada hogar cuenta con 6,7 aparatos de los encuadrados en la «gama marrón», una media que es ligeramente superior (de 7,05) en las viviendas unifamiliares y también en los hogares del litoral mediterráneo (6,85).

Entre esos electrodomésticos, el «rey» es la televisión, presente en prácticamente todos los hogares españoles, seguido por el microondas, los aparatos de dvd, seguido de los ordenadores, las cadenas de música o los videojuegos. Y según la misma fuente, en cada hogar existe por ejemplo una media de 1,6 televisiones con sistema de «reposo» o «standby» que requieren del usuario el «esfuerzo» suplementario de apagarlas para que su consumo sea nulo mientras no se están viendo.

Además, una gran parte de esos televisores utilizan un descodificador externo de TDT, y desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) han observado que este pequeño aparato consumen prácticamente la misma energía cuando se está utilizando que cuando se encuentra en posición de «reposo».

Datos del IDAE

Los datos del IDAE ponen de relieve también que el número medio de bombillas en cada hogar ronda los 23, que ese número es mayor también en el área mediterránea que en la España continental y que es también mayor en las viviendas unifamiliares que en los pisos. Entre esas bombillas, son más abundantes las convencionales, aunque las de bajo consumo han conseguido durante los últimos años importantes cotas de entrada en los hogares y en cada uno de éstos hay una media de 7 bombillas de estas características.

Todos, organizaciones de consumidores y organismos públicos, coinciden, tras poner de relieve el elevado porcentaje de la factura achacable al consumo «fantasma», en que la solución, cuando el aparato no incorpora la opción del apagado completo, es incorporar un dispositivo eliminador de standby.

Para educar a los ciudadanos en esos hábitos que pueden contribuir a reducir el consumo y el impacto medioambiental han proliferado durante los últimos años iniciativas, sobre todo en Internet, y entre ellas el sitio «Hogares Verdes», dirigida, según sus promotores, a personas preocupadas por el impacto ambiental y social de sus decisiones y hábitos cotidianos.  Y el sitio virtual recibe a sus visitantes con un significativo proverbio chino: «Antes de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu casa«.

Vía EFEverde

La UE imputa «costes ocultos» y «compensaciones excesivas» a las eléctricas españolas

dependencia energetica de España - efimarketLa Comisión Europea (CE) acaba de publicar su «Evaluación del programa nacional de reforma y del programa de estabilidad de España para 2012», un documento que efectivamente evalúa las reformas emprendidas por Mariano Rajoy desde su llegada al poder y que, lógicamente, también repasa las medidas que, en materia de política energética, ha ido alumbrando el ejecutivo español. En ese documento, la CE no considera responsables del déficit de tarifa a las energías renovables y sí señala, sin embargo, «costes ocultos» en la tarifa y asimismo «compensaciones excesivas» que estarían beneficiando a las grandes eléctricas y engordando artificialmente el déficit tarifario.

Es posible decirlo más alto, pero va a ser difícil decirlo más claro. El veredicto está muy claro: «la suspensión de las ayudas a las energías renovables desalienta la inversión en el sector y hará difícil que España alcance sus objetivos energéticos y climáticos en el marco de la Estrategia Europa 2020«. Más aún: la Comisión apunta a que, con una menor proporción de energías renovables, la dependencia de España de la energía importada crecerá por encima de la tasa actual, que se sitúa en el 79%, valor que es ya muy superior a la media de la UE, que está en el 54%. La trascendencia de ese incremento de la dependencia está fuera de toda duda: España importó en 2011 petróleo y gas (en la imagen, buque metanero) por valor de más de 53.000 millones de euros.

La Comisión también critica claramente las trabas burocráticas que padecen las renovables españolas y propone simplificar «los complejos procedimientos de autorización y planificación» y suprimir «otros obstáculos al desarrollo de las energías renovables», todo lo cual –considera la CE– puede «contribuir a reducir el coste de estas energías» (sobre el particular, véase el informe PV Legal).

Pero la evaluación de la CE no se limita a las energías renovables, sino que también aborda las convencionales y, ahí, las conclusiones son muy distintas. Hasta el punto de que el documento de la Comisión se muestra particularmente duro cuando habla de los «costes ocultos» del sistema eléctrico, que asegura se derivan «del apoyo a ciertas actividades reguladas», actividades que la CE cita explícitamente. A saber: las «subvenciones ineficientes y perjudiciales para el medio ambiente concedidas a las minas de carbón», en primer lugar, y, en segundo, la «rentabilidad del transporte y la distribución en función del valor neto de los activos utilizados».

No deja títere con cabeza

A la luz de lo dicho, la evaluación concluye que el sistema de tarificación de la electricidad en España es «ineficiente y presenta un nivel de competencia insuficiente». La Comisión señala que esa competencia insuficiente en el sector energético «ha contribuido, al menos en parte, a la constitución del déficit tarifario, al favorecer una compensación excesiva de algunas infraestructuras, tales como centrales nucleares y grandes centrales hidroeléctricas, ya amortizadas, o al mantener la concesión de subvenciones ineficientes y perjudiciales para el medio ambiente a las minas de carbón«. Para colmo, apunta la CE, «estas medidas no se han traducido en menores precios». Y un apunte para contextualizar: las propietarias de la inmensa mayoría de las centrales térmicas que queman carbón en nuestro país, de las grandes presas hidroeléctricas y de todas las centrales nucleares de España son Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, E.On y EDP, compañías eléctricas todas integrantes únicas de la Asociación Española de la Industria Eléctrica, la gran patronal Unesa).

Cómo define el déficit la CE

En su informe, la Comisión explica el déficit de tarifa del siguiente modo: «España ha limitado tradicionalmente los precios finales de la electricidad para una serie de grupos de consumidores en el marco de un sistema de tarifas reguladas. Las tarifas no siempre cubren los costes, lo que implica que el sistema genera un déficit tarifario a expensas de la empresa suministradora del servicio. Dado que los costes de generación y los costes regulados (por ejemplo, costes de transporte y distribución) aumentan más deprisa que las tarifas, el déficit ha aumentado significativamente en los últimos años, habiendo alcanzado un importe acumulado de 24.000 millones de euros (equivalentes a más del 2% del PIB)». Sobre los costes del sistema, vénase páginas seis y siete del Informe sobre el Sector Energético Español de la Comisión Nacional de Energía.

La explicación de la CE continúa así: «dos terceras partes de este importe (aproximadamente 17.000 millones de euros) están garantizadas por el gobierno, lo que ha permitido a las empresas suministradoras su cobertura. En 2009, el gobierno revisó íntegramente el sistema de tarificación con el fin de garantizar que los precios de la electricidad cubrieran todos los costes. Sin embargo, se siguió permitiendo a los hogares de bajo consumo, que representaban el 83% de los consumidores, disfrutar de precios de la electricidad que no reflejaban todos los costes del sistema (entre los elementos integrantes de los costes totales se incluye la producción, el transporte y la distribución de electricidad y diversas medidas de política energética), mediante la aplicación de la tarifa de último recurso (hogares con una capacidad de consumo limitada a 10 kW). Como consecuencia de ello, el déficit tarifario siguió acumulándose».

Qué es la Tarifa de Último Recurso, TUR

El uno de julio de 2009 entró en vigor un nuevo sistema de tarifas eléctricas en el que coexisten, por un lado, el mercado libre, y por otro, una tarifa fijada por el gobierno: la denominada Tarifa de Último Recurso. La TUR es el precio regulado por el gobierno para el suministro obligatorio a los clientes que no quieren o no pueden buscar otras ofertas en el mercado. Según el gobierno, la TUR «se configura como una tarifa refugio y está reservada para los consumidores que tienen una potencia contratada inferior a 10 kW, segmento en el que se encuentran prácticamente todos los consumidores domésticos». El ejecutivo eligió cinco empresas, denominadas comercializadoras de último recurso, para dar servicio a los clientes con derecho a la TUR. Esas cinco empresas son filiales de las mismas que integran Unesa. A saber: Endesa Energía XXI, Iberdrola Comercialización de Último Recurso, Gas Natural, HC-Naturgás Comercializadora Último Recurso y E.ON Comercializadora de Último Recurso.

Fuente: Energías Renovables

La tarifa eléctrica volverá a subir a mediados de Julio casi con toda probabilidad

tarifa electricidad - efimarketLa CNE no ha recibido la propuesta de orden de tarifas de julio para su dictamen preceptivo. Por tanto, Industria estaría fuera de plazo para revisarlas el 1 de julio, aunque podría recurrir al truco del anterior trimestre: enviarla a finales de mes, aprobarla semanas después y aplicarla retroactivamente el día 1.

El Ministerio de Industria ha superado el límite temporal para remitir a la Comisión Nacional de Energía (CNE) la propuesta de orden de tarifas de acceso (o peajes) para el tercer trimestre, que entrarían en vigor el 1 de julio. También en el anterior trimestre el ministerio superó dicho plazo a la espera de ver el resultado de la subasta Cesur, en la que se determina el precio de la energía, que es la mitad de la factura de la luz (la otra mitad son los peajes o la parte regulada que determina el Gobierno), y acabó imponiendo una subida de forma retroactiva.

Conocer el resultado de la subasta le permitió jugar con el resultado de la misma a la hora de revisar la tarifa de último recurso o TUR: si cae el precio de la electricidad puede subir más los peajes y viceversa. En todo caso, el informe de la CNE sobre la propuesta es de obligado cumplimiento.

Por esta razón, y es lo que parece que hará de nuevo el ministerio, hará su propuesta a finales de este mes, la aprobará bien entrado julio, pero la subida será retroactiva desde el día 1. En abril, fue aprobada el día 26, pero se aplicó desde el primer día de ese mes. Un sistema que nunca se había aplicado y que fuentes del sector consideran de dudosa legalidad.

La subasta Cesur que determinará el precio de la electricidad en el próximo trimestre se celebra el día 22. Los precios apuntan a la baja, lo que daría margen al ministerio para subir de nuevo los peajes. El fuerte incremento del último trimestre (1.600 millones de euros a pagar de forma fraccionada hasta finales de mes) incluía las refacturaciones que el Tribunal Supremo obligaba, que elevaban un 17% el precio de los peajes.

Con todo, la relevancia de las nuevas tarifas está en el hecho de que van a coincidir con la segunda fase de la reforma del sistema eléctrico previsto para la segunda quincena de este mes, si el ministro de Industria, José Manuel Soria, cumple con su palabra (cosa rara, ya que el sector de las renovables aun está esperando que se apruebe el decreto del balance neto, o net metering, que podría activar de nuevo el sector).

Aunque todo apunta a que la citada reforma se va a saldar con medidas fiscales (tasas o impuestos a la producción), nada ha trascendido sobre su concreción. Las grandes eléctricas de Unesa (Endesa, Iberdrola, Gas Natural, HC Energía y Eon), que se temen lo peor, aseguran que no han recibido ni un solo documento del Gobierno, que tampoco les ha pedido propuestas particulares. Las relaciones con el secretario de Estado de Energía, Fernando Marti, y con el ministro de Industria son tan cordiales como infructuosas. En ellas Soria sigue insistiendo en la coletilla de que el esfuerzo para eliminar el déficit de tarifa se asienta sobre tres pilares: las empresas, los consumidores y el Estado.

Por el momento, el Gobierno no solo no ha soportado ningún esfuerzo, sino, por el contrario, ha trasladado partidas de los Presupuestos (costes extrapeninsulares) a la tarifa. Fuentes próximas al ministerio aseguran que las propuestas ya están sobre el papel y que han sido remitidas a Moncloa, por lo que se esperan noticias frescas en un breve espacio de tiempo. Por su parte, en el sector eléctrico más bien creen que el artífice de las medidas es el jefe de la Oficina Económica de Presidencia, Álvaro Nadal.

Fuente: Cinco Días