Usa regletas o tiras de alimentación (el típico “ladrón” de los que tienen interruptor para encender y apagar) ?
Si están conectados a la red, muchos electrodomésticos continúan consumiendo energía aunque estén apagados. Por ello, lo recomendable es que enchufemos todos los aparatos eléctricos que podamos en regletas con interruptor (tiras de alimentación) para poder romper la alimentación y que los electrodomésticos dejen de consumir. Es muy habitual dejar el cargador del teléfono enchufado y otros aparatos similares. ¡No lo hagas! Además, si se va la luz de casa, si hay una sobrecarga por una tormenta o cualquier problema con la instalación eléctrica la regleta apagada protegerá a los aparatos que estén enchufados a ella (en lugar de directamente al enchufe).
Elige a conciencia las bombillas o luminarias eficientes y de menor consumo
Mayor eficiencia, no es igual a menor consumo: esto ocurre con los electrodomésticos. En general con las bombillas es más sencillo porque por ejemplo la potencia es literal (una bombilla tradicional usa 80W y una LED 8W). Hay diferentes tipos de bombillas eficientes que te pueden ayudar a ahorrar luz: eco-halógenas, de bajo consumo y LED (para más info lee este post nuestro). Lo importante es, en cualquier caso, que sustituyas las antiguas tradicionales cuanto antes, aunque te suponga cierta inversión inicial. Esa inversión se amortiza pronto y lo podrás comprobar en la factura eléctrica.
Conoce lo que gastas con un monitor de energía / medidor de consumo eléctrico
Estos aparatos resultan muy útiles tanto para particulares como para locales de negocios. Los medidores de consumo tienen un precio muy económico y nos aportan información práctica para tomar decisiones: te permite conocer qué aparatos están consumiendo energía y en qué medida indicando si tienes un electrodoméstico que dispara la factura. Además, te informan en tiempo real de cuánta electricidad lleva consumida tu vivienda y lo compara con otros meses. El conocimiento sobre algo siempre permite decidir sobre ello y tomar las decisiones más acertadas.
Controla la luz de tus habitaciones
Aunque parece obvio, muchas veces lo olvidamos: deberíamos apagar la luz en cuanto la dejemos de usar (excepto si vamos a volver repetidamente). También es preferible evitar las que se activan por sensores de movimiento y los reguladores de intensidad si no tenemos bombillas recomendables para ello. Nos ayudará también mantener limpias las bombillas (quitarles el polvo). Y por último, por supuesto, aprovechar la luz natural, tanto para iluminación como para otras tareas como secar la ropa al natural en lugar de con secadora, si podemos.
La lavadora ECO
Si queremos reducir el gasto de energía eléctrica podemos también hacer algo muy sencillo siempre que sea posible: programar la lavadora para lavar en frío (30º en lugar de 40º o 60º) y seleccionar un nivel de revoluciones inferior al habitiual. Si nuestra lavadora cuenta con un programa definido como ECO sería lo ideal.
Mantén tu casa aislada y hermética
El aislamiento en el hogar es fundamental para sentirnos cómodos en casa y para ahorrar energía eléctrica. Tanto con la calefacción en invierno como con el aire acondicionado en verano, la falta de aislamiento produce pérdidas energéticas muy graves que repercuten en una factura económicamente más cara y en un esfuerzo energético de los aparatos eléctricos con efecto en su vida útil y en nuestra huella medioambiental.
¿Cómo podemos aislar nuestra vivienda?
En el mercado existen aislantes para pintura (si vas a pintar las paredes), film ailslante para ventanas, burletes para desajuste para ventanas o entre la puerta y el suelo (la marca TESA está especializada en thermo covers y otro tipo de elementos aislantes, aunque hay muchas otras más marcas. Afortunadamente hay multitud de pequeños elementos que suponen un desembolso mínimo y mejoran el aislamiento de la vivienda ahorrando mucho dinero a final de mes en climatización.
Cocinar en vitrocerámica o inducción ?
Tengas la que tengas, un tip asegúrate de usar el círculo adecuado para el tamaño de sartén u olla que vayas a utilizar. Parece obvio pero a veces no nos damos cuenta y desperdiciamos bastante electricidad.
Por supuesto, la factura de la luz
Asegúrate de que la potencia que tienes contratada en tu vivienda es la necesaria para tus aparatos eléctricos, ni más ni menos. Tienes derecho a elegir la tarifa contratada que más te convenga y actualmente existen muchas suministradoras de energía según la zona donde vivas.
Energías renovables: paneles solares, aerotermia ?
Si tienes la opción, no pierdas la oportunidad. Gracias al avance tecnológico y a la reducción de costes podemos instalar pequeñas instalaciones fotovoltaicas (kits de autoconsumo) que nos ayudarán muchísimo con el consumo eléctrico. ¡Aprovecha el sol!
Otra tecnología que te puede interesar es la aerotermia, que utiliza el aire como parte de su alimentación para producir calor, frío y agua caliente sanitaria ACS. Según el tipo de aparato de aerotermia que elijas (según las necesidades y la estructura de tu vivienda) también podrás conjugarlo como complemento de paneles solares. La aerotermia es sin duda una manera de ahorrar electricidad y energía, aunque requiere una inversión inicial de entre 900 y 4000€ según lo que necesites (te vendrá bien si te vas a mudar o a renovar tu casa!).
¿Llevas un negocio? ¿Conoces los condensadores de energía reactiva?
Especialmente a las empresas les conviene saber si están pagando energía reactiva en sus facturas. Es energía que se genera y se paga económicamente pero no se utiliza. Si fuera así, los condensadores de energía reactiva suponen un ahorro importante a largo plazo. Los condensadores requieren de una cierta inversión inicial y asesoramiento de profesional especializado.