Empezamos e año con malas noticias energéticas. Los precios de la gasolina y del gasóleo subirán previsiblemente a partir del 1 de enero debido a la desaparición en 2013 de las exenciones a los biocarburantes y al probable traslado de este nuevo gravamen al consumidor final.
En la actualidad, los biocarburantes tienen un tipo impositivo cero en el Impuesto Especial de Hidrocarburos (IEH), si bien la Ley 2/2012 de Presupuestos Generales del Estado (PGE) establece que a partir de enero de 2013 este gravamen deberá ser el mismo que el de los combustibles convencionales de automoción.
De esta forma, el bioetanol tributará al mismo tipo que la gasolina, esto es, a 424 euros por cada 1.000 litros, mientras que el biodiésel pagará un impuesto similar al del gasóleo, de 331 euros por cada 1.000 litros.
A efectos prácticos, este nuevo impuesto obliga al consumidor a pagar 2,35 céntimos por cada litro de bioetanol y 3,02 céntimos por cada litro de biodiésel, si bien a estos importes es necesario añadir el IVA del 21%, que se carga tanto sobre el precio antes de impuestos como sobre los impuestos.
En el surtidor, la medida puede tener un efecto automático de subidas del 0,3% sobre los precios actuales, de 1,374 centimos de euro el litro en el caso de la gasolina y de 1,341 centimos en el del gasóleo.
Este efecto relativamente moderado sobre el precio final se debe a que los biocarburantes solo suponen una porción del combustible. En concreto, el porcentaje actual de mezcla de biodiésel sobre el gasóleo se sitúa en el 9,43%, mientras que la mezcla de bioetanol en gasolina ronda el 7,45%, según datos ofrecidos por la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP).
La propia AOP aclara que la asociación no se pronuncia sobre la futura evolución de los precios de los carburantes en España, ya que «cada compañía o el propio empresario de la estación de servicio establece su precio y sus decisiones son absolutamente independientes y autónomas, en función de sus políticas comerciales».
34% MÁS DE IMPUESTOS DESDE 2009.
La nueva subida de impuestos a los carburantes se suma a las que se han venido aplicando desde 2009, cuyo importe asciende de media a 18 céntimos por litro tanto en la gasolina y en el gasóleo, o a un 34% más, según los cálculos de la asociación empresarial.
En lo que va de año, los incrementos en el tramo autonómico del impuesto de ventas minoristas de determinados hidrocarburos (IVMDH) han tenido un impacto en el precio medio español de cerca de 2,5 céntimos por litro.
En junio de 2009, el Gobierno ya aumentó el impuesto especial de hidrocarburos de la gasolina y del gasóleo, hasta 2,9 céntimos de euro por litro, mientras que en julio de 2010 elevó el IVA del 16% al 18%, y posteriormente al 21% en septiembre de este año.
A partir del 1 de enero, el IVMDH se integrará en el impuesto especial de hidrocarburos, que quedará a su vez desdoblado en tres tramos: el estatal, el estatal especial y el autonómico.
Fuente: Europa Press