¿Conocías la isla de Eigg? Esta pequeña ínsula se encuentra en el archipiélago de las Hébridas, en Escocia (al norte de la península de Ardnamurchan), y es famosa porque sus habitantes generan toda la energía que consumen a través de un sistema combinado de energía solar, energía eólica y energía hidroeléctrica. Por tanto, es totalmente autosuficiente y cubre sus propias necesidades energéticas utilizando los recursos naturales de su entorno.
Los habitantes de esta pequeña isla (de 20 kilómetros cuadrados) invirtieron 2,3 millones de euros en crear un sistema energético que generase toda la energía que necesitan para vivir y realizar su trabajo. Tardaron 10 años en completar el proyecto, pues además de instalar toda la tecnología necesaria tuvieron que comprar la isla al Gobierno británico para obtener plena autonomía respecto a su gestión de la energía. En la isla de Eigg existen 45 hogares, 6 edificios y 20 comercios que se conectan a este sistema eléctrico basado en energía limpia.
Actualmente, las energías renovables les permiten ser totalmente autosuficientes e independientes de empresas energéticas, pues ellos mismos producen el 95% de su energía a través del sol, el viento y las mareas. Para casos de emergencia, la isla de Eigg también cuenta con sistemas de baterías de almacenamiento y dos generadores diesel.
La comunidad de la isla ha abrazado la autosuficiencia y un estilo de vida verde, asumiendo la responsabilidad de la gestión de su uso de la energía y fomentando el ahorro activamente en su vida diaria. Monitores de energía informar a los residentes de la cantidad de energía que utilizan, advirtiendo de antemano cuándo se acercan al tope de los cinco kilowatios. Además, un sistema de alertas por colores y mensajes de correo electrónico avisan a los habitantes del estado de sus suministros energéticos.
Los habitantes de la isla de Eigg viven principalmente de la naturaleza, la pesca y la ganadería, pero también del turismo. Disponen de impresionantes parajes naturales, fauna y flora que atraen al turista, además de ofrecer cursos de inglés estivales para estudiantes en los que enseñan a los jóvenes a adaptarse a vivir utilizando menos energía y cuidando el planeta.
¡Un destino imprescindible para hacer una visita si viajas a Reino Unido!